Introducción: La densidad mineral ósea es un parámetro comúnmente utilizado para determinar la salud ósea de las personas. Varios factores afectan tanto positiva como negativamente a la densidad mineral ósea. Por ejemplo, la alimentación o el tipo de entrenamiento que se realiza tienen influencia sobre este parámetro. El deporte tiene la capacidad de intervenir en este proceso, sin embargo, no todas las modalidades deportivas presentan los mismos efectos sobre la densidad mineral ósea.
Objetivos: Los objetivos de este trabajo son obtener los valores de densidad mineral ósea según la modalidad deportiva, comparar estos resultados entre los distintos deportes diferenciando entre hombres y mujeres y, por último, describir pautas de actuación para mejorar la densidad mineral ósea en deportes donde se vea más perjudicada.
Material y métodos: El trabajo es una revisión sistemática que ha seguido la metodología PRISMA. Se ha realizado una búsqueda bibliográfica en tres bases de datos diferentes: Scopus, Web of Science y PubMed. Posteriormente se han procesado los datos con un gestor bibliográfico (EndNote) y Excel.
Resultados: Los resultados de densidad mineral ósea en deporte masculino fueron peores en escalada, ciclismo, hípica, natación, golf y deportes de raqueta. En deporte femenino los valores más bajos se observaron en: atletismo, escalada, triatlón, duatlón, ciclismo, ballet, hípica y orientación. Por otra parte, modalidades deportivas como fútbol americano, baloncesto o fútbol, son algunos de los deportes que mejores resultados obtuvieron tanto en deporte masculino como femenino.
Conclusión: Los resultados de DMO se presentan en las tablas 3 y 4 de este trabajo. De la misma forma, en las figuras 6,7,8,9 y 10 se comparar los resultados entre deportes diferenciando sexos. Por último, las pautas para mejorar la densidad mineral ósea en mujeres son, principalmente, la implementación del ejercicio de fuerza e impacto.
Introducción: La densidad mineral ósea es un parámetro comúnmente utilizado para determinar la salud ósea de las personas. Varios factores afectan tanto positiva como negativamente a la densidad mineral ósea. Por ejemplo, la alimentación o el tipo de entrenamiento que se realiza tienen influencia sobre este parámetro. El deporte tiene la capacidad de intervenir en este proceso, sin embargo, no todas las modalidades deportivas presentan los mismos efectos sobre la densidad mineral ósea.
Objetivos: Los objetivos de este trabajo son obtener los valores de densidad mineral ósea según la modalidad deportiva, comparar estos resultados entre los distintos deportes diferenciando entre hombres y mujeres y, por último, describir pautas de actuación para mejorar la densidad mineral ósea en deportes donde se vea más perjudicada.
Material y métodos: El trabajo es una revisión sistemática que ha seguido la metodología PRISMA. Se ha realizado una búsqueda bibliográfica en tres bases de datos diferentes: Scopus, Web of Science y PubMed. Posteriormente se han procesado los datos con un gestor bibliográfico (EndNote) y Excel.
Resultados: Los resultados de densidad mineral ósea en deporte masculino fueron peores en escalada, ciclismo, hípica, natación, golf y deportes de raqueta. En deporte femenino los valores más bajos se observaron en: atletismo, escalada, triatlón, duatlón, ciclismo, ballet, hípica y orientación. Por otra parte, modalidades deportivas como fútbol americano, baloncesto o fútbol, son algunos de los deportes que mejores resultados obtuvieron tanto en deporte masculino como femenino.
Conclusión: Los resultados de DMO se presentan en las tablas 3 y 4 de este trabajo. De la misma forma, en las figuras 6,7,8,9 y 10 se comparar los resultados entre deportes diferenciando sexos. Por último, las pautas para mejorar la densidad mineral ósea en mujeres son, principalmente, la implementación del ejercicio de fuerza e impacto. Read More